Proyecto de residencia y exposición en Espacio Reunión, San Juan, Puerto Rico.
El entorno como catalizador: El proceso de búsqueda, tanto personal como pictórico, me ha llevado a conocer distintos lugares con su respectiva práctica artística, permitiéndome observar cómo al mismo tiempo que el ser humano modifica el entorno para adaptarlo a sus necesidades, el entorno modifica su conducta y organización social.
La orografía del terreno, clima, etc. y la capacidad de adaptación y superación de esas condiciones por parte del ser humano determinará el éxito de un pueblo, cultura, sociedad, etc. Conforme esas condiciones vayan cambiando, exigirá una evolución por parte de esas sociedades, su migración o su desaparición. Esquema, mapas o convenciones sociales como medio de interacción o comunicación entre distintas culturas.
El proyecto ha consistido en realizar una reflexión sobre la relación comunidad puertorriqueña con el entorno a través de la memoria, el propio entorno en sí y la utilización del mapa como recurso de delimitación y a la hora de movernos por el entorno.
Como punto de partida se ha solicitado a varias personas de la comunidad de Puerto Rico que delimiten en un mapa de la isla los sitios en los que han residido, puntos que se han unido para crear formas geométricas, las cuales se han utilizado para crear monotipos.
Me
he desplazado a lugares importantes en sus vivencias personales y he creado mi
propia memoria del entorno, llevándola al campo artístico. La obra de arte como
mapa cartográfico de la experiencia vital del artista. A través de su
hibridación con otros medios, el mapa se transforma en una experiencia en sí,
en una cartografía personal e improbable para el resto de sujetos, cada uno de
los cuales, tendrán una experiencia distinta al acercarse a él.
7 monotipos: Sin título, tintas calcográficas Charbonnel y ofset, papel Velin BFK Rives Arches 300 gr., 40 x 30 cm. 2025.